Una de las cosas más difíciles de ser médico es cuando tengo que dar algunas noticias que generan preocupación en los pacientes debido al diagnóstico de tumores cerebrales. No obstante, después, cuando les puedo dar buenas noticias gracias al resultado de intervenciones quirúrgicas y tratamientos exitosos, me acuerdo del por qué elegí esta maravillosa profesión.
Hoy hablaremos de uno de esos diagnósticos que atemorizan pero que, gracias al avance de la ciencia, tienen tratamiento.
Astrocitoma
El astrocitoma es un tipo de cáncer que se puede formar en el cerebro o en la médula espinal. Su nombre se debe a que se forma en células denominadas astrocitos, que proporcionan apoyo a las neuronas. Lamentablemente, el astrocitoma es el tipo de glioma más común diagnosticado en niños.
¿Cuáles son los síntomas?
Realmente eso dependerá de la ubicación del tumor.
- Los astrocitomas en el cerebro pueden provocar convulsiones, dolores de cabeza y náuseas.
- Los astrocitomas que se forman en la médula espinal generan debilidad y discapacidad en la zona afectada.
¿Qué tan agresivo es este tumor?
Los astrocitomas pueden ser tumores de crecimiento lento, o pueden, algunos casos, crecer con rapidez. Precisamente, esa “agresividad” determina el pronóstico y el tipo de tratamiento que realizaremos.
¿Cómo se diagnostica?
Especialmente a través de una combinación de métodos.
- Indagación y examen neurológico. Como médico, puedo evaluar la vista, la audición, el equilibrio, la coordinación, la fuerza y los reflejos. El objetivo es diagnosticar la parte del cerebro donde se encuentra específicamente el tumor.
- Pruebas de diagnóstico por imágenes. Podemos recurrir al apoyo de la tecnología a través de una resonancia magnética o una tomografía computarizada.
- Una extracción de una muestra de tejido que se analiza en el laboratorio.
¿Cuál es el tratamiento?
El tratamiento contempla una cirugía neuro – oncológica para extraer el tumor. El objetivo, obviamente, es extirpar toda la lesión, pero a veces el astrocitoma está cercano o en áreas de importante función cerebral, lo que hace que esto sea demasiado riesgoso. No obstante, al extirpar la lesión se reducen los signos y síntomas, devolviéndole calidad de vida a los pacientes.
En esos casos se realiza también radioterapia y quimioterapia con la finalidad de disminuir el potencial de crecimiento de los astrocitomas restantes. Escríbame con toda confianza si tiene consultas sobre este tema o considera que presenta síntomas parecidos.
